Tipos de Fosas Septicas

La elección de una fosa séptica se basa en cuatro parámetros básicos.

Seleccionar una fosa séptica.

La elección de una fosa séptica se basa en cuatro parámetros básicos.
Modelos de Fosas
1.

Usuarios.

Número de usuarios a los que da servicio la fosa séptica

2.

Niveles.

Nivel de contaminación de las aguas residuales

3.

Desechos.

El Tipo de desechos que se manejara en la soda séptica

4.

Exigencia.

Grado de exigencia de la depuración de las aguas negras

Con base a estos parámetros se debe elegir entre un tipo de fosa séptica u otra. A mayor número de usuarios se necesita una fosa de mayores dimensiones y según el nivel de contaminación de las aguas (uso del edificio) se opta por un tipo de fosa u otro.

Los distintos tipos de fosa séptica se caracterizan principalmente por el material empleado en su fabricación. Los sistemas de tanques sépticos de ahora están disponibles en materiales ligeros como plásticos y fibra de vidrio y también pueden venir en componentes desmontados para facilitar el transporte.

Tipos de fosas sépticas

Fosas sépticas de concreto / hormigón.

Los tanques sépticos de concreto son herméticos y resistentes y son el recipiente preferido ideal para el almacenamiento y tratamiento séptico en el sitio. Los tanques sépticos de hormigón son muy resistentes, pero para instalar uno se necesita acceso de una grúa montada en un camión.

Criterios a conciderar

Fosas sépticas prefabricadas.

Son ideales para casas pequeñas, segundas residencias y fincas en zonas rurales sin conexión al alcantarillado en las que se generan pocas aguas residuales o sólo de forma esporádica. También suponen una solución provisional hasta que se disponga de la conexión al alcantarillado general.

Criterios a conciderar

Fosas sépticas compactas.

Las fosas sépticas compactas están fabricadas de polietileno de alta densidad (PEAD/HDPE) y disponen de un filtro biológico aeróbico, lo que las hace aptas para el tratamiento de aguas residuales.

Recomendaciones

Fosa séptica de acumulación.

Una fosa séptica de acumulación es un recinto estanco y cerrado de polietileno, hormigón, etc., que recibe las aguas residuales para su posterior retirada periódica por un gestor autorizado. No se produce ninguna situación de vertido por lo que no es necesaria ninguna autorización.




Fosas sépticas prefabricadas.

Algunas fosas sépticas prefabricadas disponen de cubierta telescópica para facilitar la inspección de la cámara séptica.

Existe una variedad de fosas sépticas prefabricadas que varían más que nada en los materiales de fabricación, en las capacidades de almacenamiento y la durabilidad de cada una, entre ellas se encuentran:

Fosas sépticas de fibra de vidrio: están hechas en forma de “cebolla”

Fosas sépticas de plástico/polietileno de alta densidad (PEAD/HDPE): son más resistentes a la oxidación y a los procesos químicos naturales que suceden dentro de un tanque séptico. Sin embargo, su peso más ligero las hace más susceptibles al daño estructural e incluso a moverse dentro del terreno durante períodos de suelo húmedo. Se necesita una instalación cuidadosa para garantizar que el tanque no sufra algún daño.

Fosas sépticas de Acero: los tanques o cisternas de acero se oxidan, especialmente cuando están enterrados en el suelo, por lo que no son en absoluto recomendables. La cubierta de un tanque séptico de acero puede llegar a estar tan corroída que alguien que caminara sobre él podría caer dentro. Suelen diseñarse para durar unos 20-25 años.

Como funciona una fosa septica